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El panorama económico ha cambiado significativamente en los últimos meses. Los efectos provocados por la propagación del COVID-19 y las medidas de mitigación implementadas para contenerlo tuvieron impactos sustanciales en el funcionamiento de la economía, las instituciones financieras y la infraestructura financiera de América Latina y el Caribe.
El sector financiero juega un papel importante en la navegación de la crisis de Covid-19, no solo como contribuyente al producto interno bruto de los países, sino también como facilitador de la actividad económica.
La Asociación de Supervisores de Bancos de las Américas (ASBA), BID Lab y el proyecto de Gobernanza e Inclusión Financiera (GIF), en colaboración con Oliver Wyman, trabajaron en tres reportes para identificar medidas que pudieran limitar el impacto de COVID -19 sobre el sistema financiero.
01 Salvaguardando las funciones críticas del sistema financiero
Identifica los servicios financieros y bancarios que son críticos para el funcionamiento de la economía y la estabilidad financiera y presenta planes de acción para aumentar la resiliencia y preparación del sistema financiero.
02 Construyendo la inmunidad del sistema financiero
Describe las acciones de política para abordar el aumento del riesgo crediticio y preservar la estabilidad financiera, considerando las particularidades de la crisis de COVID-19 e introduce recomendaciones para lidiar con una economía sobre apalancada.
03 Desbloqueando la inclusión financiera
Analiza una serie de recomendaciones a mediano plazo para la región, basadas en conversaciones con partes interesadas relevantes, tanto del sector público como privado. Describe opciones de política y proporciona estudios de caso para cada recomendación para ilustrar las mejores prácticas y las deficiencias.
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